En el 2009 muchos nos llevamos una tremenda decepción cuando uno de los mayores héroes de los noventa se daba la mano con una "personajillo" de nombre Justin Timberlake para perpetrar sin duda uno de los peores discos de la primera década del siglo XXI. Qué forma de renegar de un pasado glorioso, coño el amigo Chris Cornell es una de las voces definitivas del Rock (de acuerdo que el proyecto Audioslave no me convenció, pero seguía siendo míster Cornell) en esta ocasión parecía haber ido un paso más allá de la domesticación tras escuchar ese artefacto y abrazar de buen grado la sodomía. Pero todo era pésimo en este "Scream" pues no la voz seguía estando ahí, aunque por momentos tanto tratamiento electrónico la desfigurase un tanto y la música mejor no hablar la guitarra mínimo protagonismo, la batería una caja de ritmo sin alma y por este camino podríamos seguir. Sin embargo si algunas de esas canciones hbiesen estado en las manos de un productor decente y se les hubiese dado el tratamiento adecuado el resultado podría haber sido otro muy diferente, baste ver la nefasta versión de "Never far away" que apareció publicada en el álbum.
Y una posterior remezcla con un cariz más rockero donde la guitarra tiene por fin protagonismo y la voz sin tanto filtro demuestra que Chris sigue sabiendo cantar, esperamos con ansias el nuevo "hijo" de Soundgarden mientras conformemonos con algo audible de "Scream".
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